Brisas del Lago se llenó de luces, alegría y color la noche del viernes 29 de agosto cuando esta localidad ubicada al sur de Maracay, estado Aragua, disfrutó de la 1era Fiesta en la Calle, iniciativa evangelística desarrollada por el Consejo Evangélico de Venezuela (CEV) en alianza con la Asociación Evangelística Billy Graham (BGEA).
Esta comunidad colinda con el Lago de Valencia (también conocido como Lago Los Tacariguas) y debido a la crecida del agua, cientos de familias han tenido que ser reubicadas. Sin embargo, las personas que permanecen experimentaron la bondad y el amor de Dios a través de este enorme trabajo que puso de manifiesto a sus habitantes que Dios no se ha olvidado de ellos.
Fue así como a las 6:30 pm entre amenazas de lluvias y después del restablecimiento de la energía eléctrica, inició la fiesta con presentaciones musicales a cargo de DJ Fabi, y las bandas Hope Music y Jahaziel Band, quiénes tuvieron la tarea de arar el terreno de los corazones de 1200 asistentes, para recibir la semilla de la Palabra de Dios.
Más de la mitad de la población de la comunidad escuchó el mensaje del Pr. Moisés Jeréz “Uno más para Cristo”, basado en la historia del endemoniado gadareno (Marcos 5:1-20), donde llamó a las personas a “salir del cementerio del odio, del dolor, de la droga, del alcohol, de la pornografía, de la mentira, del fraude…”. Sin importar cómo se llame tu cementerio, es un lugar de tristeza, recuerdos y dolor, es un lugar donde no quieres estar.
Y al igual que este hombre de la historia bíblica cuando vio a Jesús salió corriendo y se arrodilló ante Él, así los asistentes fueron levantando sus manos y acercándose hacia la plataforma en señal de rendición. Uno a uno fueron llegando y finalmente, 305 almas aceptaron a Jesús en sus corazones. Hubo fiesta en la calle por una noche, pero habrá fiesta en los cielos por la eternidad.
En palabras del Pr. Hugo Durán, de la Segunda Iglesia Bautista Dios me Ayuda, perteneciente a la Convención Nacional Bautista de Venezuela (CNBV) expresó su enorme agradecimiento al equipo organizador, servidores y donantes que hicieron esto posible, “tengo 30 años de ministerio en Brisas del Lago y jamás se había visto ni realizado un evento como el que vimos hoy, es algo sin precedentes y le doy la gloria a Dios porque Él permitió que llegarán hasta aquí” aseguró con gran alegría y gratitud.
Todo este esfuerzo fue posible gracias a la oración y participación de las iglesias locales vinculadas al proyecto, que ahora les corresponde abrazar a los nuevos miembros de la familia de Dios y caminar con ellos en un proceso de discipulado.
Desde el CEV glorificamos al Señor por lo que está haciendo en nuestra nación y nos sentimos honrados en formar parte de Su obra en esta tierra.
Equipo de Comunicaciones CEV





